Siempre es importante recordar y dar a conocer los siete principios fundamentales de la red humanitaria más grande del orbe que tiene como misión aplacar el sufrimiento humano, proteger la salud, la vida y hacer respetar a la persona humana.
¿Cuáles son los principios fundamentales de nuestra institución?
Humanidad, Neutralidad, Imparcialidad, Independencia, Voluntariado, Unidad y Universalidad son los principios de la Cruz Roja Chilena e Internacional que entregan un marco ético, operacional e institucional a la labor que llevamos a cabo en todo el mundo.
Es la base, el enfoque que se adopta para ayudar a las personas necesitadas durante situaciones de emergencias, desastres naturales u otros conflictos.
#Humanidad
Prestar auxilio, sin discriminación, prevenir y aliviar el sufrimiento de los hombres en todas las circunstancias. Proteger la vida y la salud, así como respetar a la persona humana. Favorece la comprensión mutua, la amistad, la cooperación y una paz duradera entre todos los pueblos. El sufrimiento es universal y exige una respuesta, no debemos actuar con indiferencia, respetar la dignidad humana es esencial, ayudar y proteger a los demás sin distinción de que han hecho o quienes son.
#Neutralidad
Se abstiene de tomar parte en las discrepancias y en las discusiones de orden político, racial, religioso e ideológico. No se debe tomar partido de palabra o de hecho, en ningún momento o lugar, ni dar esa impresión. Esta condición permite llegar a las personas que necesitan ayuda en las crisis y mantener un diálogo con las partes involucradas en conflictos y otras situaciones de emergencia.
La neutralidad ayuda a convencer a las partes en un conflicto.
Las unidades deben afianzar el prestigio de su acción neutral en estos tiempos, para poder conseguir la confianza de todas las partes y proceder de manera eficaz desde el inicio de un conflicto u otras situaciones a fin.
#Imparcialidad
No hace ninguna discriminación por nacionalidad, raza, creencias religiosas, clase u opiniones políticas. Se esfuerza por aliviar el sufrimiento de las personas, guiándose únicamente por sus necesidades, y dando prioridad a los casos de angustia más urgentes.